Un nuevo orden mundial se dibuja. Es lo que se visualiza tras el reciente resultado de la cumbre del G20 celebrada en Hamburgo. Las alianzas pretéritas entre bloques de países han dado paso a alianzas estratégicas, seguramente bilaterales.
De esta reciente cumbre, todos sus miembros excepto Estados Unidos se mantienen férreos en el compromiso alcanzado en el Acuerdo de París para evitar la destrucción del planeta poniendo freno al cambio climático y el calentamiento global.
Otra novedad ha sido la admisión en el comunicado final de la introducción de medidas en contra de prácticas comerciales injustas, perseguido por la administración Trump, que pese a que se sigue defendiendo el libre comercio y se condena el proteccionismo, se incluye esta cláusula que se incorpora para hacer un guiño al presidente estadounidense.
Sea como sea, Europa parece haber salido reforzada de esta última cumbre del G20. En primer lugar por haberse mantenido firmes frente a Estados Unidos en el tema del cambio climático y también por el anuncio de un nuevo tratado de libre comercio con Japón.