La cantidad que aportará cada entidad al capital de la Sareb aún está por determinar, y depende de si finalmente BBVA y otras entidades deciden sumarse.
En total, la Sareb tendrá unos fondos propios de 5.000 millones, de los que 1.000 millones serán capital directo (que aportarán los accionistas que se incorporen al capital) y el resto (4.000 millones) deuda subordinada.
Además de inversores españoles, el Ministerio de Economía tiene especial interés en incorporar inversores internacionales al capital de la Sareb, y pretende que aporten al menos 500 millones de euros.