Pero lo cierto es que la región de América Latina y el Caribe recibió en 2012 la cantidad récord de 173.361 millones de dólares, un 6,7% más que en 2011, y eso en medio de la crisis que está sufriendo el mundo desarrollado. Estados Unidos y los países de la Unión Europea, con España a la cabeza, continúan siendo los principales inversores en América Latina y el Caribe, aunque también figuran Canadá y Japón entre los más importantes. Brasil ocupa el primer lugar en cuanto a IED con 65.272 millones de dólares (descenso del 2%), pero el destacado crecimiento de Chile, (30.323 millones de dólares y aumento del 32%), que ha adelantado a México, es el dato más relevante.
Colombia ya ocupa el tercer lugar con 15.823 millones de dólares, seguido de México con 12.659 millones; Argentina, con 12.551 millones y Perú, 12.240 millones de dólares. Estos seis países acaparan el 86% de la IED en 2012. Las previsiones para 2013 estiman para 2013 una horquilla variable de descenso del IED desde el 3 % hasta un crecimiento del 7%. Se cree que estas cifras obedecen al crecimiento económico de la región, los altos precios de las materias primas y la elevada rentabilidad de las inversiones asociadas a la explotación de recursos naturales.