El impacto de los aranceles impuestos por Donald Trump en la economía global ha sido moderado hasta ahora, según un análisis de Ibercaja Gestión realizado siete meses después del llamado «Día de la Liberación».
El informe destaca que, tras los acuerdos alcanzados, las tasas efectivas de los aranceles resultaron inferiores a lo inicialmente previsto, mientras que la actividad económica ha mostrado resiliencia y los precios generales no han sufrido fuertes incrementos. No obstante, los bienes más expuestos a los aranceles, con alta intensidad importadora, sí registran subidas en sus precios.
El dólar se ha depreciado, y el tipo de cambio no ha equilibrado la balanza comercial. Según Ibercaja Gestión, los márgenes de las empresas exportadoras podrían verse afectados si no logran repercutir los costes adicionales en los precios, aunque hasta el momento no se ha observado una caída significativa en los precios de importación.
El análisis también subraya que los flujos comerciales empiezan a sufrir distorsiones, con una desaceleración del comercio mundial, especialmente por la caída de importaciones en Estados Unidos durante el segundo trimestre.
Además, la incertidumbre se traslada a empresas e inversores. Aunque los acuerdos arancelarios alcanzados por EE. UU. mitigaron parcialmente las tensiones, muchos incluyen compromisos estrictos y áreas grises, lo que abre la puerta a futuras renegociaciones.
Finalmente, Ibercaja Gestión apunta que este nuevo orden mundial afectará al crecimiento a largo plazo. Sin embargo, factores como el desarrollo de la inteligencia artificial podrían contrarrestar parcialmente este efecto negativo, aunque el incremento del PIB esperado se situará por debajo del potencial de una economía más integrada.