Cloudera, la única compañía que impulsa la Inteligencia Artificial a través de los datos en cualquier entorno, anuncia que 2026 marcará el inicio de la “Era de la Convergencia”, una nueva etapa en la evolución de la IA.
El cierre de 2025 llega tras un año de constantes transformaciones tecnológicas, protagonizadas por el avance de agentes de IA cada vez más autónomos y por una aceleración notable en su adopción empresarial. Todo apunta a que 2026 mantendrá este ritmo de innovación. Por ello, los expertos de Cloudera han identificado cuatro grandes tendencias que definirán el panorama tecnológico el próximo año.
Avances en la adopción de la IA y nuevos perfiles laborales
“En 2026, la adopción de Inteligencia Artificial seguirá creciendo a un ritmo constante, pese a las predicciones de desaceleración del mercado”, afirma Manasi Vartak, Chief AI Officer de Cloudera. “A medida que las empresas superen la fase de experimentación y encuentren retornos de inversión medibles, seguirán demandando tanto IA generativa como IA agéntica.”
El gran reto estará en conectar los agentes de IA con los datos y el contexto corporativo, requisito indispensable para que estos sistemas sean realmente útiles. Muchas compañías ya han demostrado capacidades avanzadas, pero ahora deberán probar que sus agentes son aptos para entornos de producción y que pueden superar obstáculos relacionados con acceso a datos, gobernanza, seguridad y permisos.
Paralelamente, el concepto de IA Responsable continuará evolucionando. Ya no se centrará únicamente en el sesgo o la equidad, sino que exigirá responsabilidad de extremo a extremo, abarcando gestión de datos, comportamiento de los sistemas e impactos en la organización.
Las empresas que desplieguen IA agéntica necesitarán marcos de gobernanza más estrictos, con elementos como registros de agentes, observabilidad y control de versiones de flujos de trabajo completos. Aunque los modelos públicos seguirán dominando, crecerá la adaptación de los modelos a las necesidades específicas de cada empresa.
Llega la “Era de la Convergencia”
2026 será el primer año de convergencia real, una etapa en la que se diluyen las fronteras entre la nube y los centros de datos. Tras décadas alternando entre el control del on premise y la flexibilidad del cloud, ahora ambos convivirán sin fricciones gracias a plataformas de gestión unificadas que permiten ejecutar cargas de trabajo donde más convenga según criterios de seguridad, eficiencia y cumplimiento.
Tal y como señala Sergio Gago, CTO global de Cloudera: “La verdadera ventaja competitiva no vendrá de quien tenga el modelo más grande, sino de quien haga un uso más inteligente y eficiente de los recursos. En la Era de la Convergencia, la IA debe gestionarse como una parte más de la fuerza laboral. No se trata de elegir entre nube y on-premise, o entre humanos y máquinas, sino de integrarlo todo bajo una misma arquitectura confiable y eficiente.”
Además, el concepto de rendimiento cambiará. Ante la creciente demanda de IA y de capacidad de cómputo, la eficiencia energética se convertirá en un KPI principal, y no en un factor secundario.
El futuro del retail dependerá de la IA
“La IA será un factor diferencial para el sector retail en 2026”, afirma Neelabh Pant, directora global de AI for Retail en Cloudera. Las estimaciones apuntan a que podría generar entre 240.000 y 390.000 millones de dólares en valor para la industria. El 91% de los retailers ya está invirtiendo en IA, y los primeros adoptantes están obteniendo retornos seis veces más rápidos.
Los retailers con mejores resultados son los que toman control de sus datos y los conectan con todas sus operaciones: desde escaparates y comportamiento del cliente hasta historiales de pedidos e inventario, independientemente de dónde residan esos datos.
Cuando los sistemas de datos trabajan de forma conjunta, los retailers obtienen una visión holística de su negocio, lo que se traduce en mayor personalización, procesos de compra más fluidos y experiencias mejor adaptadas al consumidor.
La accesibilidad a los datos también transformará la estructura organizativa: Gartner estima que el 75 % de las nuevas conexiones de datos serán creadas por empleados no técnicos. Las empresas que desplieguen plataformas sencillas y de autoservicio tomarán decisiones más rápidas y colaborarán de forma más ágil. En cambio, quienes mantengan los datos encerrados en TI perderán competitividad.