Con una previsión de inversiones de casi 200.000 millones de reales en los próximos años, el Gobierno Federal anunció hace unas semanas la nueva fase del Programa de Investimento en Logísica (PIL), que va a privatizar aeropuertos, autopistas, ferrocarriles y puertos. Del total, 69.200 millones se aplicarán durante el segundo mandato de Dilma Rousseff.
El paquete de inversiones es un intento más por parte de la presidenta de modernizar una buena parte de la infraestructura del país. En lo que se refiere a autopistas, el Gobierno prevé la subasta de 15 lotes de carreteras, totalizando 6.974 kilómetros en diez estados. También está confirmado que pasarán a la iniciaiva privada los aeropuertos de Porto Alegre, Salvador, Fortaleza y Florianópolis. Las subastas comenzarán en el primer trimestre de 2016. En la parte ferroviaria, los tramos incluidos en el programa son los de la línea Norte-Sur entre Palmas (TO) y Anápolis (GO), entre Barcarena (PA) y Açailândia (MA), y entre Anápolis, Estrela D´Oeste (SP) y Três Lagoas (MS).
En cuanto a puertos, la previsión es de arrendamiento de cincuenta áreas para manipulación de carga en puertos públicos, comenzando por los puertos de Santos y Pará, y coninuando con Paranaguá, Itaqui, Santana, Manaus, Suape, São Sebasião, São Francisco do Sul, Aratu, y Río de Janeiro. El modelo de financiación también ha variado, para implicar en menor medida al BNDES, uilizando bonos y obligaciones por parte de la iniciaiva privada a la hora de licitar. Las empresas que se conviertan en adjudicatarias de las obras podrán optar, no obstante, a una financiación del 70% del proyecto.