Rajoy, que se reunió con Hollande en Madrid el pasado 30 de agosto, viajará a la capital francesa acompañado de los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; de Interior, Jorge Fernández Díaz; de Industria, José Manuel Soria; de Agricultura, Miguel Arias Cañete; y de Fomento, Ana Pastor.
La actual situación económica de la eurozona centrará esta XXII cumbre hispano-francesa, aunque también estarán encima de la mesa asuntos clave como la colaboración en la lucha antiterrorista, un apoyo que Rajoy volverá a agradecer al Gobierno francés.
Este encuentro se produce una semana antes del próximo Consejo Europeo de Bruselas, y servirá para visualizar la apuesta de ambos Gobiernos por la irreversibilidad del euro. Y como ha venido haciendo en sus últimas citas, el jefe del Ejecutivo insistirá en que se cumplan los acuerdos sobre unión bancaria y fiscal, por entender que los mercados están respondiendo a los avances que se dan en la construcción europea, sostienen fuentes gubernamentales.
Francia considera que la relación bilateral con España ha alcanzado «un nivel de confianza recíproca sin precedentes desde la transición democrática», según fuentes del Palacio del Elíseo. Estas relaciones, han sido posible sobre todo por la cooperación en materia policial y judicial en la lucha contra ETA, cuyos éxitos han permitido acabar con el malestar de España por la antigua «abstención» de Francia en el conflicto con la banda terrorista.
Francia es hoy el primer cliente comercial para España y su primer proveedor, mientras que España supone para Francia su tercer cliente y quinto proveedor. Más de 1.800 empresas francesas están hoy implantadas en nuestro país, donde generan más de 285.000 empleos.