El pedido de los inspectores de la UE y del FMI se concretó en una teleconferencia que mantuvo el ministro de Finanzas griego, Angelos Venizelos, con los representantes de la llamada troika, Poul Thomsen, por parte del FMI; Mathias Mors, por parte de la UE, y Claus Masuch, del BCE. La teleconferencia, en la que se busca cerrar un acuerdo para destrabar el crédito de 8000 millones de euros, se reanudará hoy por la noche, indicaron fuentes de la UE y el Ministerio de Finanzas griego.
En la conversación, el ministro griego hizo hincapié en que Grecia acelerará las reformas que ya están aprobadas y propondrá nuevos recortes más allá de un impuesto extraordinario a las propiedades con el que, pese al escepticismo del FMI y la UE, tenía previsto recaudar 2000 millones de euros adicionales que le hacen falta antes de fin de año.
El representante del FMI, dejo claro que pese a que Grecia ha hecho progresos, necesita un cambio estructural en su política fiscal y económica.