Entre las medidas anunciadas por la aerolínea destacan la reducción de capacidad en más de un millón de asientos para esta segunda mitad de año y la supresión de de ocho aviones. Otra de las medidas es la supresión de rutas no consideradas rentables y la disminución de frecuencias. Además, la compañía dejará de operar en algunos aeropuertos regionales para concentrarla actividad en Dusseldorf, Berlín, Palma de Mallorca y Viena.
Entre las rutas que Airberlin ha decidido suprimir, por ser poco rentables, se encuentran las de Frankfurt-Hamburgo, Frankfurt-Nápoles, Stuttgart-San Petersburgo, Múnich-El Cairo y Dusseldorf-París. En cuanto a los aeropuertos regionales en los que va a dejar de operar se encuentran vuelos desde Münster/Osnabrück a Londres, Viena y Sylt, así como las conexiones desde Colonia/Bonn con diversos destinos en Marruecos y a Valencia.
Además, durante los meses de invierno ya no se podrá viajar directamente con Airberlin desde Colonia a Innsbruck, Nápoles y Palermo. Se cancelan los trayectos de Hannover a Londres. A partir de noviembre y solo durante el invierno, Karlsruhe, Dresde y Basel pierden la conexión directa con Palma de Mallorca. Ya no se volará a Londres ni a Manchester desde Paderborn. Asimismo, se reducen los vuelos a Málaga y Alicante en el programa de Airberlin desde algunos aeropuertos, y también, como en el caso de Klagenfurt, se retiran del programa, al menos durante el invierno. Erfurt dejará de operar definitivamente.