Los responsables de recursos humanos y relaciones laborales de Caixa Galicia y Caixanova y los representantes de los empleados de ambas cajas constituyeron ayer en Santiago la mesa de negociación del pacto laboral. El grupo de trabajo tenía como objetivo primordial consensuar un acuerdo sobre las condiciones laborales y salariales y la composición de la plantilla tras el proceso de fusión entre ambas entidades.
Las direcciones de las cajas estuvieron representadas por Miguel Ángel Prado, director de relaciones laborales de Caixa Galicia; Rubén Martínez, director de recursos humanos de Caixanova; Antón Cárdenas, responsable de asesoría laboral de Caixa Galicia; y Gonzalo Iglesias, director de relaciones laborales de Caixanova. Los empleados estuvieron representados por las secciones sindicales en las cajas de Comisiones Obreras (6 representantes), CSICA (4), CIG (3), UGT (2) y CGT (1). En la mesa negociadora también participaron asesores legales y laborales de las entidades financieras y de los sindicatos.
Los directivos de Caixanova y Caixa Galicia expusieron a los representantes de los trabajadores las características básicas de la propuesta que presentarán formalmente a partir del martes de la semana próxima y que, en una primera parte de la negociación, se centrará en el tratamiento laboral de los excedentes de las plantillas (unas 1.200 personas) originados por la fusión. Las cajas trataron con los sindicatos los principios generales que regirán la futura reordenación de plantillas, mediante la aplicación de soluciones no traumáticas que contemplan el recurso a las prejubilaciones como fórmula principal.